Sin perder tiempo, me decido a entrar al tema que pongo en liza. Seguro que más de un Director de Juego y algún que otro pj se sienten identificados con este tema, porque, no nos engañemos, los pjs son unos pillos que intentan hacer y deshacer a su antojo. El que más y el que menos (Me incluyo en este segundo grupo) se las ha tenido que ver con el típico listillo que dice cosas del estilo: “Era una tirada de prueba” “No, el dado verde era el de las unidades, no el de las decenas, así que mi tirada es 90, y no 09” “No, no es pifia, es que se me ha caído por accidente el dado. Ahora tiro” "No, si el dado cae desde la mesa al suelo no vale el resultado". En fin, una enorme retahíla de excusas y despropósitos para no aceptar la dura realidad de una pifia propia, o de un crítico de un pnj.
En más de una ocasión apetece dar un puñetazo en la mesa y exclamar a los cuatro vientos “¡Te aguantas!”, en una suerte de expresión vocal de la edad adulta que a uno se le presupone, pero en la mayoría de las veces que me he visto en esa situación he decidido pasar por alto la misma. No es que me sienta orgulloso de ello, pero la amistad con mi grupo de pjs así como la certeza de que me los podía cargar con un giro argumental, minimizaban el daño a mi autoestima y me conducían a los derroteros que los pjs. Y en cuanto a vosotros ¿Cómo lo veis? ¿Dado en la mesa preso?
Es un tema que he padecido, inclusive como nota personal te diré que el viejo grupo que tenía me hizo trampas mucho tiempo, porque me fiaba de ellos y no asomaba a cada tirada la cabeza de la pantalla, hasta que un día me enteré y el grupo se acabó, porque lo primero que debe haber en una mesa de juego es respeto y educación.
ResponderEliminarLa amistad la componen muchos valores y uno de ellos debe ser el respeto.
A día de hoy no suelo tener problemas, porque gracias a este tipo de experiencias pasadas suelo pillar rápidamente a esos manos rápidas y a los que recogen rápido los dados y suelo darles "pequeñas" lecciones de humildad...
Que no es que me pase, sino simplemente despues se la devuelvo con un buen tajo... o... alguna situación comprometido que requiera labia no dados, no se si me entendéis...
Se arregla poniendo dentro de un recipiente de cristal los dados para que agites y enseñes resultado o algo así.
ResponderEliminarAunque en casos así siempre se puede decir: "En caso de duda, pifia para el jugador y crítico para el enemigo" ya verás como ya no hay problemas en la mesa.
A mi no me suele pasar la verdad. En ocasiones lo dicen más entre risas y suplicas que de otra forma. Pero entiendo que jugar así debe ser muy molesto, y más si ocurre algo como lo que comenta el compañero Sendel.
ResponderEliminarMuy fuerte lo de @Sendel, la verdad ...
ResponderEliminarEn general, no tengo quejas al respecto. Si algún dado queda "montado" con otro objeto (no apoya por completo una cara en la mesa) lo solemos dar por no válido, y si cae lo mismo, excepto si el tirador dice justo cuando cae un "lo que salga vale ..." XDD
Estimado Sendel, me apena que tu grupo se rompiese por esas malas artes. Bueno, realmente lo que me apena es que alguien llegara a hacer trampas en algo que al fin y al cabo es una diversión (Y de qué nivel) para todo el mundo. Romper el grupo era una consecuencia lógica de ese tipo de comportamiento.
ResponderEliminarEn otros posts comentaba que no entendía ese afán de querer ganar a toda costa, y creo que hacer trampas es reflejo de esa mala forma de entender el juego. Muchas de las situaciones más graciosas que he vivido en el mundo del rol se han debido a pifias y a desencuentros, como la vez que al mago de mi grupo le metió una paliza un goblin borracho (Con actividad menos “no sé cuántos mil” y todo). Si el personaje de uno la pifia o la palma, pues a otra cosa, se hace un nuevo personaje y seguir jugando y pasándolo bien, que es de lo que se trata.
Gracias por comentar.
Buena solución, Nebilim, aunque algo taxativa, autoritaria, impositiva… ¡Qué demonios! ¡Excelente solución! Así no se me subirán a las barbas, jeje.
ResponderEliminarGracias por comentar.
Me alegro que hayas tenido esa suerte, Dungeon Master. El juego debe ser de confianza y resultar divertido. Realmente en el espíritu del juego casos como el sufrido por Sendel o, en menor medida, el expuesto por mí, no deberían darse.
ResponderEliminarGracias por comentar.
Eso denota buen rollo y ganas de divertirse pase lo que pase, Mario. ¡Qué envidia de grupo!
ResponderEliminarGracias por comentar.
Yo nunca he tenido realmente problemas de este tipo, la verdad. Para jugar haciendo trampas... mejor no jugar.
ResponderEliminarSi es verdad que tuve hace largos años un jugador que hacía eso de "esta tirada era de prueba", pero lo hacía en coña y si le preguntabas que había sacado antes te lo decía riéndose "vale, vale, me has fichado, era una pifia" xD. Pero siempre de buen rollo, sin causar realmente ningún problema en la mesa :P
Tienes razón, Transmetropolitan. Para estar haciendo trampas, mejor recoger los dados y a otra cosa. Estas situaciones se pueden resolver de una manera mucho más agradable, como la que expones tú de pillar de buen rollo al “tramposillo”.
ResponderEliminarGracias por comentar.
Ante una tirada dudosa (se caia, se montaba en otro objeto, se lo tragaba el perro...) nosotros volviamos a tirar los dados. Y como el oscuro siempre era el de las decenas, no habia mas problema. Bueno, cuando se los comio el perro no pudimos tirar esos dados, pero tiramos otros (y al perro no le sentaron mal)
ResponderEliminarCoherente solución, Ki. Sólo espero que el perro se aficionase también al rol.
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