Páginas

jueves, 29 de octubre de 2015

AC Syndicate: primeras impresiones

A estas alturas de la vida de este blog no os sorprenderá que haya vuelto a caer en las frías garras de Ubisoft. Así es, amigos, me he dejado embaucar nuevamente por estos desalmados franceses que pretenden acabar con mi economía. Al igual que con AC Unity, mi experiencia de juego se está produciendo con PS4. Antes de realizar una entrada concienzuda sobre esta nueva entrega de la saga Assassins Creed, no quería dejar pasar la oportunidad de compartir mis primeras impresiones con vosotros. Empecemos recordando alguno de los trailers que han precedido al lanzamiento del juego.


Bien, como ya habéis visto, AC Syndicate nos lleva a la Londres victoriana. No he estado nunca en Londres, salvo que os parezca válido haber jugado a The Order: 1808 o ser un seguidor habitual de la genial serie Sherlock, así que no os puedo decir por mi experiencia de primera mano si los escenarios son tan realistas como debieran. Sin embargo, esto es algo que sí puedo asegurar con un rápido vistazo a nuestro querido Google. El apartado gráfico es nuevamente sensacional, aunque en ocasiones me recuerda demasiado a la París de AC Unity, pero sin gente sin cara... No voy a decir que no me haya encontrado algún momento gráfico "curioso", pero no me he encontrado esto:


Continuemos con la historia y el modo de juego. En AC Syndicate manejamos a dos asesinos que son hermanos gemelos: Evie y Jacob Frye. Ambos son entrenados por su padre, siendo otro ejemplo de cómo suele meter Ubisoft a los asesinos en la Hermandad. Si recordáis, el padre de Ezio era asesino, Altair se crió en la Orden, Connor era nieto de un asesino e hijo de un templario... A día de hoy, el único que llegó de casualidad y no "por herencia" a la Orden parece que es Edward.

En cuanto a estos dos hermanos, se supone que Jacob tiene un perfil más agresivo, mientras que Evie tiene un perfil más sigiloso, aunque en los primeros compases del juego esto no se nota. Sólo con el desarrollo de los personajes, que detallaré más adelante, comienza a apreciarse esta distinción. 


He de decir que esta dupla de personajes es bastante de mi agrado. Como os indicaba antes, esa especialización en unas tareas para uno y otro no se nota en los primeros compases del juego. Está por ver si más tarde esto se refleja más a las claras, pues de momento sólo veo distinción en las habilidades más avanzadas. Tal vez implementar desde el principio diferencias más evidentes (como que Evie fuese la única que pueda utilizar el silbato para atraer a enemigos, o que Jacob fuese el único capaz de realizar asesinatos dobles) habría estado mejor. Aun así, contar con dos personajes me parece muy acertado. De hecho, os diré que me gusta más Evie que Jacob, al contrario de lo que pensaba que iba a ocurrirme antes de jugar.


En cuanto a la jugabilidad, AC Syndicate se asemeja a AC Unity. Los controles de los personajes son muy parecidos, y muchas de las acciones a desarrollar durante el juego son idénticas. Así, nos encontramos con eventos multitudinarios como los vistos en el París revolucionario. También tenemos elementos similares como el desarrollo del equipo. Por momentos es algo caótico por la cantidad de armas y objetos a mejorar, pero echando la vista atrás me parece que es menos ambicioso que la ingente cantidad de equipo de AC Unity. Sin duda, creo que en esto se ha mejorado porque veía un sinsentido en Unity tener tantas armas y equipo.

Pasamos al desarrollo del personaje. Se siguen empleando puntos de habilidad. Estos se consiguen mediante experiencia que se obtiene realizando las tareas habituales de apertura de cofres, asesinatos, misiones, etc... Cada mil puntos, un punto de habilidad. Las habilidades más caras cuestan 6 puntos, y muchas de ellas no son accesibles sin haber adquirido una habilidad anterior. Las habilidades en las que difieren los hermanos son las más caras, como habréis supuesto, y tal vez lleguen en un momento en el que la historia está demasiado avanzada como para hacer notar una verdadera diferencia entre usar a uno u otro.

Como en otras entregas, se debe conquistar la ciudad. En cada distrito hay una serie de misiones que reducirán la presencias de los blighters, la banda de los templarios, hasta un momento en que podamos matar al jefe del distrito y hacernos con su control. Las misiones, que tienen mayor recompensa en experiencia y libras si logramos objetivos secundarios, pueden ser la conquista de un cuartel, rescatar a niños de fábricas o secuestrar a algún templario para llevarlo a un policía que colabora con los asesinos. Con cada nueva misión que hagamos para cada uno de nuestros contactos aumentará su lealtad a nosotros, proporcionando nuevas mejoras.


Por lo tanto, podéis ver cómo se ha mejorado el aspecto de las bandas que ya teníamos en AC Rogue. Evidentemente, esto se debe al peso de las bandas en el guión de AC Syndicate. A medida que avanzamos en la historia, llegamos disponer de una guarida móvil, a bordo de un tren. Era evidente que los trenes debían estar presentes en esta edición de AC. No sólo resulta curioso, sino que nos permite recorrer la ciudad, aunque de modo aleatorio (no sé si el tren obtendrá la capacidad de ir a una estación concreta a nuestra elección si avanzo en el juego). La presencia de trenes, y los carros de caballos, nos proporcionan peleas en movimiento bastante destacables.

Voy a ir acabando esta aproximación a AC Syndicate con alguna pincelada más. La banda que controlamos se llama los Rooks. Tenemos una serie de mejoras para que nuestros aliados de la banda, que podemos reclutar por la ciudad, sean más poderosos. No me puedo quitar de la cabeza el regusto Saints Row que tiene esta mecánica. Seguro que si habéis jugado a ese juego y también lo hacéis a AC Sydicate compartiréis mi opinión. Lo mismo ocurre cuando manejamos un carro de caballos: tenemos una suerte de GPS para no perdernos si marcamos un objetivo.

Lo último que he hecho en el juego es una tarea que nos propone uno de nuestros aliados: saqueos a barcos, trenes y carruajes. Se trata de misiones muy rentables, tanto para adquirir experiencia como para ganar libras (un  bien algo escaso al principio del juego). Son muy sencillas, tal vez demasiado, y nos permiten abastecernos de materiales para crear nuevas armas y equipo. Sin duda, resulta un gran acierto para que la ganancia de dinero no sea tan lenta. Esto es algo que eché en falta en AC Unity.

Bueno, espero que esta primera toma de contacto os haya parecido interesante. Personalmente, AC Syndicate pinta muy bien. Se han mejorado bastantes cuestiones, y las novedades me resultan agradables. Todavía echo en falta un punto de guión que le da más renombre al juego, pero he de decir que ya me parece mejor que AC Unity.

No hay comentarios:

Publicar un comentario