Sí, amigos, os encontráis ante una nueva entrada de esa serie de posts que podríamos agrupar bajo el concepto ¿En qué se ha gastado esta vez el dinero el tarado de Bindôlin? En esta ocasión, llega el turno a Jedi Power Battles.
Sí, la evidencia es aplastante. Este juego ya existió en play station, que por entonces no era ni play station uno ni ps one ni nada por el estilo, a principios de siglo. Fue un juego de mucho recorrido en mi grupo de amigos porque nos permitía jugar a dobles y afrontar mejor algunos de los niveles más endiablados que ofrecía, y que ofrece, pues esta nueva versión del juego, siendo generosos con lo de "nueva", viene a aportar muy pocas novedades en forma de algún personaje nuevo, y poco más.
Llegado este punto, os preguntareis por qué he comprado el juego. Pregunta lícita, sin duda, y respuesta obvia a poco que conozcáis el blog: pura y genuina nostalgia. Como os decía antes, este juego tuvo mucho recorrido entre mis amigos (y yo mismo, claro) y quería tenerlo disponible para jugarlo cuando quisiera y ver si había envejecido bien. Spoiler: la verdad es que no.
En efecto, el juego sigue con los problemas que tenia en su momento y que no han sido mitigados ni un poco (e intuyo que tampoco interesaba). En primer lugar, algunas pantallas son largas hasta decir basta, con algunas misiones que si las fallas te obligan a empezar de cero, lo cual hace aflorar mis traumas de adolescencia. Por otro, es un juego de plataformas que tiene unos controles bien malos, con lo cual terminas piñándote de la peor de las formas posibles.